Nos reencontraremos con Manolo y David, que comparten piso en una ciudad cualquiera. No son para nada homosexuales, pero el rol de David, el que trae dinero a casa, y el excesivo amaneramiento de Manolo, que se ha criado con su madre, seis hermanas y un mayordomo homosexual, hacen que la gente hable de más. Es la sinopsis del espectáculo y el punto de partida de las carcajadas del público.
Función tras función, año tras año, ‘Dos hombres solos sin punto com…ni ná’ ha creado una auténtica complicidad con un público que rara vez ve la obra sólo una vez.