Ocho agentes del cuerpo de Policía Local de Estepa han ampliado su formación en "primeros auxilios", en concreto asistieron ayer a un curso de RCP (Resucitación Cardio Pulmonar) y desfibrilación externa automática. El curso se complementó con otras técnicas básicas sanitarias, como masajes cardiacos o acciones a emprender tras un ahogamiento por bloqueo de las vías respiratorias.
La medida se ha puesto en marcha para estos ocho agentes, y se pretende que se amplíe al resto de la plantilla, tras el nuevo equipamiento de desfibrilador, con el que cuenta ya el coche patrulla de la policía.
Esta nueva formación y este nuevo equipamiento habilita a nuestra policía para atender casos de emergencias sanitarias donde una persona pierda el conocimiento y necesite de atención médica de urgencia.
La formación la llevó a cabo dos técnicos de la empresa FIPS, dedicada a la formación en temas de prevención sanitaria.