8M - LECTURA DE MANIFIESTO POR EL DÍA INTERNACIONAL DE LAS MUJERES

Otro de los actos tradicionales de este 8M, es la lectura de manifiestos por los derechos de las mujeres y por la igualdad. El primero de estos manifiestos ha sido leído por el concejal de Igualdad, Mujer y Ciudadanía, Florencio Salvador Díaz.

Posteriormente, el alcalde de Estepa, Antonio Jesús Muñoz, ha leído también un manifiesto en el que se pone en valor el trabajo realizado por el Centro Municipal de Información a la Mujer y también se hace una reflexión sobre el papel de los representantes políticos en cuestiones de igualdad.

MANIFIESTO POR EL 8M

Buenas tardes y bienvenidas todas las mujeres que hoy os habéis reunido aquí para celebrar vuestro día, el 8M, que en cierto modo, también es nuestro día, el día de todas y todos.

Como alcalde de Estepa, un pueblo al que considero especialmente sensible con el respeto a los Derechos Humanos, la celebración del 8M supone cada año un reto vital: No pasar de puntillas por este día, No pasar el 8M como fecha simbólica en el calendario. Cada año nos proponemos hacer del 8 de marzo, un momento de reflexión y de balance del trabajo realizado en defensa de los derechos de todas las mujeres y sobre todo un día de reivindicación.

Un año más quiero poner en valor el trabajo que desde el Centro Municipal de Información a la Mujer se realiza en defensa de todas las mujeres y niñas.

Si bien, cada año comprobamos muy tristemente, que de modo general, las estadísticas vuelven a mostrarnos una realidad nada halagüeña, la brecha salarial sigue dejando huella en el empleo femenino. Y lamentablemente existen más brechas, una brecha social y de concienciación que sigue relegando los casos de desigualdad sobre la mujer, a un marginal segundo plano.

La violencia es una vez más la gran lacra que pesa sobre nuestras conciencias y lo peor, sobre el cuerpo de las mujeres que la sufren directamente.

En el Día Internacional de las Mujeres, las entidades locales debemos comprometernos a luchar por la igualdad de género en todas sus facetas. Reconozcamos que aún existen desigualdades sistémicas que afectan a las mujeres y a las niñas de nuestra comunidad y también quiero hacer hincapié en reforzar el trabajo que se puede hacer en favor de aquellas mujeres que además de su condición de género, sufren otras discriminaciones, como son las mujeres con discapacidad, mujeres migrantes, mujeres de diferentes etnias y mujeres que viven en entornos rurales.

No se puede progresar sin la mitad de la población, que son las mujeres, ni tampoco a costa de ellas. Así lo recuerda Naciones Unidas: “la igualdad de género es el mayor desafío actual en materia de derechos humanos”.

Como cada año recordamos, la Educación es la base de la nueva concienciación. Reiteramos nuestro llamamiento a la comunidad educativa para que pongan en marcha medidas y acciones de género; exigimos el compromiso de maestras y maestros, de equipos directivos y por supuesto de las familias de nuestras niñas y niños. Se requiere del esfuerzo común de todos estos grupos sociales.

La educación en valores de género comienza cada día en casa, continúa en los colegios y finaliza el día de nuevo en casa.

Finalmente, como representantes políticos que somos no podemos eludir nuestra responsabilidad ante la igualdad y los derechos de la mujeres. Arrastramos una deuda con ellas de varias décadas, algo que nos está costando mucho solucionar.

No olvidemos que desde 2017, tenemos un Pacto de Estado contra la Violencia de Género, y queremos recordar a los dirigentes de los partidos políticos con capacidad de gobierno, que están obligados a cumplir y a hacer cumplir las normas que dicta ese Pacto.

Pero lamentablemente, la realidad es bien distinta y no puedo pasar por alto que hay miembros de Partidos Políticos con responsabilidad de gobierno en instituciones españolas que no solo desatienden la llamada de las mujeres, sino que además ningunean las acciones que desde los colectivos sociales se llevan a cabo a favor de la igualdad. Sin ir más lejos, ayer mismo supimos que este año, en el Ayuntamiento de Valencia, gobernado por PP y Vox, no habrá declaración institucional de apoyo al 8M. Tampoco quiero olvidar que en la Asamblea de Madrid la señora Rubio de Vox sigue ocupando un escaño y manteniendo afirmaciones como que “el feminismo es un cáncer”, la misma que “pondría una clase de costura en la escuela”, porque “coser un botón”, empodera mucho.

No podemos olvidar que la clase política es la voz del pueblo en las instituciones, es evidente que nos queda un largo y tortuoso camino hasta remediar conductas de esta calaña.

Sin embargo, tampoco podemos desfallecer, no podemos abandonar todo lo conseguido hasta ahora.

Nos sentimos obligados a renovar el gran logro social y político alcanzado hasta hoy.

Reafirmemos nuestro compromiso con los derechos humanos de todas las mujeres y niñas, incluido el derecho a la igualdad, la autonomía sobre sus cuerpos y decisiones, y la eliminación de todas las formas de violencia y discriminación basadas en el género.

Por una sociedad igual, por una sociedad mejor: compromiso, trabajo y defensa de los derechos de las mujeres.

Gracias